18 DE JULIO 2022.
SANTO DOMINGO.-Detrás de las verjas doradas que conforman la casa donde residía el joven Frederick Alberto Ventura Pérez, se percibe un ambiente de dolor tras la pérdida de un ser humano, que según los familiares, era “el alma de la casa”.
Tras una visita de este diario al sector Pueblo Nuevo, ubicado en Los Alcarrizos, se tornó evidente la tristeza que hoy arropa los corazones de los residentes en esa comunidad.
Uno de ellos es su hermano menor, Ángelo Pérez, narró las grandes cualidades de su hermano y lo difícil que es asimilar su partida física en la tierra.
“Mi hermano era una persona única, muy social, siempre tenía una sonrisa en su rostro, la misma sonrisa que yo nunca podré olvidar. No tenía problemas con nadie, al contrario, todos parecían amar su presencia, para nosotros es difícil entender esta situación y sobre todo por la manera en la que fue encontrado su cuerpo”, contó Ángelo.
Frederick fue hallado sin vida y con múltiples puñaladas en el kilómetro 20 de la Autopista Duarte, donde se ubica un basurero, según las informaciones ofrecidas por su hermano menor, el cuerpo fue visto por dos niños que merodeaban el área.
Dentro de los tantos presentes en la casa del fenecido joven se encontraba su tío, Sisto Vélez, quien definió a su sobrino como un hombre “excelente y tranquilo” y aunque conoce los detalles de cómo quedó su cuerpo prefirió no ofrecer detalles con el objetivo de “proteger” a su hermana, es decir, la madre de Frederick.
Pese al dolor que atraviesa su familia y allegados, Ángelo envió un mensaje a la juventud del país.
“Yo le pido a los jóvenes que no confíen en nadie, el enemigo puede estar cerca y espero que todo salga a la luz pronto porque esto no fue un atraco, a mi hermano lo mataron”, dijo.